Del 13 al 18 de Abril de 2009


La búsqueda de la verdad. La respuesta a la pregunta "¿quienes somos?". Estos son los ingredientes centrales esta obra de teatro de Antonio Buero Vallejo, situada en los años 60 durante la dictadura de Francisco Franco.
Esta la obra que NO ES CULPA NUESTRA representará del 13 al 18 de abril de 2009.
Si quieres saber más de esta obra, del autor, contexto histórico, proceso de montaje o incluso reservar una entrada no dudes en visitarnos y contactar con nosotros.


EL MUNDO EN EL SIGLO XXX

lunes, 16 de marzo de 2009

Desde mucho antes de 2009 ya se veía venir lo que la contaminación que producía el ser humano iba a conllevar: el efecto invernadero, la destrucción de la capa de ozono, el calentamiento global…

En ese contexto, entre oriente y los países islámicos se empezó a fraguar una tensión, que exploraría por primera vez en lo que se conoció como La Primera Cruzada del Tercer Mileno, en 2037. A ésta le siguieron otras dos Cruzadas más, en 2083 y la peor de todas, en 2133, cuando la capa de ozono ya estaba completamente destruida, los polos estaban a punto de descongelarse completamente y la temperatura de la tierra alcanzaba los 50 ºC. Era una situación paradójica, en la que el Sol estaba completamente oculto por la inmensa capa de contaminación, pero su agobiante calor era mucho más intenso que nunca. Fueron varios los intentos vanos de reconstruir artificialmente la capa de ozono, pero eso no hizo más que incrementar la contaminación.

En torno a 2154 los primeros países costeros comenzaron a desaparecer engullidos por los mares, que habían aumentados su volumen gracias al agua derretida en los polos. Cientos de países, entre ellos España, quedaron sumergidos en casi toda su totalidad. Desapareció gran parte de la Europa occidental, Oceanía y en general, la mayoría de las islas del planeta, así como Centroamérica, dejando una clara separación entre América del Norte y América del Sur.

Se produjeron migraciones en masa y se comenzó la construcción de cuevas subterráneas que protegieran de las elevadas temperaturas. Hubo una absoluta crisis en le economía mundial. Paralelamente se intentaba luchar contra la invasión del agua por medio de enormes máquinas de drenaje que a su vez hacían dicha agua potable, y permitían luchar contra la sequía de la zona continental e improvisar cultivos y explotaciones de recursos para su alimentación. No obstante muchas especies animales y vegetales se extinguieron y la población de la raza humana se redujo a menos del 25% de la que había a principios del siglo XXI. Fueron más de 400 años de extrema dificultad para la raza humana. El mundo había quedado destrozado.

En 2560 se produjo lo que el científico alemán Bergen Schönbuch había proclamado en 2016: “[…]. A mediados del siglo XXVI un meteorito del tamaño de la Luna colisionará contra ésta produciendo graves daños en su superficie y un desequilibrio entre las fuerzas gravitatorias entre la Tierra y su satélite. Ello implicará un desvió de la inclinación optima del planeta respecto del Sol, lo que podría provocar un enorme decremento de las temperaturas, de hasta 20 ºC si mis cálculos son correctos. […]”. Efectivamente, la Luna se frágmentó y el campo gravitatorio fue alterado. En los años siguientes tuvieron lugar algunas lluvias de meteoritos. Al estar sumergida la mitad de la superficie terrestre con respecto a su situación a principios del tercer milenio, no se produjeron grandes desperfectos directos en los asentamiento humanos, pero sí provocaron maremotos que contribuyeron a empeorar más aun las desgraciadas zonas costeras. Sin embargo, tal y como aventuró Schönbuch, las temperaturas bajaron hasta los 30 ºC y se volvió a una estabilidad meteorológica.

Se procedió a una redistribución de los países del mundo según todas las islas que se habían formado. La situación social era más igualitaria, pero siempre existían grupos que pretendían sobreponerse, y tuvieron lugar algunas guerras por la lucha por las zonas más prósperas. Como siempre las guerras mejoraron la tecnología y en cuanto al transporte el terrestre quedó en un segundo plano, mientras que el marítimo y el aéreo sufrieron considerables evoluciones, puesto que muchas zonas habían quedado incomunicadas por el mar.

Llegado un momento la gente se preguntaba “¿Dónde está Dios?”. Aparecieron cientos de sectas de todos los tipos, pero hubo una creencia de carácter eminentemente humanista que destacó más que el resto, cuya deidad principal era el ser humano, su existencia y su bienestar. Su filosofía era clara: “Conoce el pasado para cambiar el presente”. Para ese fin emplearon mucha tecnología nueva y antigua, que consiguieron volver a hacer funcionar tras las catástrofes y a la que le dieron carácter sostenible.

Los humanistas que buscaban la verdad se asentaron en bosques que lograron devolver a la vida gracias a su pasión por la naturaleza y a la ya mencionada tecnología…

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